Antes de ponerme seria (¡aajajaa! Sesee, puedo ponerme seria, aunque no lo crean! ) les cuento que siguiendo la corriente a la “manada”, hoy se arma el “argolito” de Navidad.
No he conseguido en casa el quórum necesario para llevar a cabo la “tradición”, aún.
Mi Retoñor anoche se acordó pero hasta ahora (ya pasado el medio día) no lo bajó (está guardado en su habitación, arriba) y sobri-retoñito ya me dijo, textuales palabras:
“Ni gaaaanas de armar ese arbolito, – y acá viene la censura de la Mami/Tía Ivana – ‘gaseoso’….” (Gaseoso = ped…rro, ¡juas!)
¡Ajajaaa! ¡Muy sincero mi sobrino, ajaja!
En fin, veremos que sucede. Aunque les adelanto como quedaría:
Versión 2009. Y si, lo armaron los retoñores y no me dejaron que los “dirija”, ¡ajaja! “Dejanos a nosotros” fue la respuesta ante mi insistencia de poner adornos de otra manera.
En fin, si logro que me bajen el “argolito” para que lo armemos, les mostraré la versión 2010.
Aviso que después del separador navideño viene la Ivy Grinch, ¡ajaja!
Muchos aman esta época en que se festeja la Navidad y el final del año, particularmente y por las experiencias vividas, no es santo de mi devoción este mes de Diciembre.
Pero…, la vida continúa y el tiempo sigue su curso sin importarle lo que suceda.
El tiempo sí que le da para adelante sin importarle nada, ¡ajaja! Y si Gente, me Río de Janeiro porque estoy más que convencida que recordar algunas cosas “malas” hacen ver que las cosas buenas que pasaron después compensan la mala sangre que uno se haya hecho…
Así que, empezando con los aniversarios decembrinos, hoy se cumple un año del robo que sufrí en la madrugada del 8 de diciembre. Por acá se enteran como fue.
Recordarlo me hace dar cuenta de que soy capaz de cualquier cosa con tal de defender mi familia y mis cosas aún estando en silla de ruedas.
Los chorros (ladrones, delincuentes) ni se esperaban que, a pesar de romperme todo el frente de casa y el patio a pedradas, de romper la puerta y entrar, se iban a encontrar conmigo sentada en la silla de ruedas y Felipe (mi pastor alemán) haciéndoles frente a los gritos (quedé afónica por varios días), y no obstante, al no poder concretar la entrada por la puerta (se metieron por el pasillo al lado de la escalera y hasta ahí llegaron porque les corté el paso), quisieron entrar por la ventana de mi habitación y volé (de otra manera no se entiende como hice para llegar en la silla de ruedas desde el pasillo hasta la ventana que está a casi 4 metros en un santiamén) para darle unos palazos, literalmente, mientras forcejeaba el Luisito Amigorena (así se llama el “menor delincuente”) para entrar a mi casa.
Y si, no iban a entrar porque yo se los iba a impedir, de eso no les quepa la menor duda. Uno saca fuerzas de donde no hay cuando se trata de defender a la familia, se los puedo asegurar.
Por “suerte” atraparon a dos con las cosas que me robaron, solo una campera del autor de mis días no recuperamos porque el 3º se escapó corriendo cuando vio a la policía.
Tuvieron su “juicio” (por acá post alusivo con pelos y señales) pero como son menores la sacaron barata, y al ser vecinos (viven en la esquina de mi casa) tienen una orden de restricción y no pueden acercarse a mi casa por nada. No lo cumplen, pero bueno, al menos no han intentado nada otra vez.
En fin, ya saben que siempre digo que lo pasado pisado, pero tengo que reconocer que hay cosas del pasado que son necesarias recordar para comprobar que aún en los momentos más difíciles, somos capaces de enfrentar ciertas situaciones traumáticas y vivir para contarlo…
Ese es uno de los “aniversarios”, tengo un par más, pero se irán enterando en el transcurso del mes.
Y si, viene por etapas…
¡Buen miércoles, Gente!
Simplemente recordarlo para estar mas atenta, porque hoy nos toman desprevenidos en cualquier lugar, geme querida.
ResponderEliminarPonte armar con los retoños el arbolito.
Ahora que escribí "retoños", ya están dejando de serlo, no?
Bueno mejor me voy...
Un beso enorme, te quiero mucho ♥
Ufff, me acuerdo cuando viniste a contarnos lo que pasó... me acuerdo que no podía creer la guerra campal que vivieron y que aún más me asombró cómo defendieron todos juntos lo suyo, como vos con tus garras de leona no dejaste que esos "menores delincuentes" les sacaran todo.
ResponderEliminarLa verdad che... sos una tuff girl!
Es verdad que hay que olvidar los malos momentos, pero no del todo..Especialmente hoy, que hay que estar siempre en guardia..
ResponderEliminarAbrazo
Holaa ivanuchi, por aca pasa lo mismo, mi hija dijo: yo no lo voy a armar este año, asi, categórica, y yo dale, dale, no!!!, y bueno tendré que hacerlo yo. Tanto preparativo y luego en un mes lo desarmamos de vuelta....
ResponderEliminarcomo anda señora, que nunca hablamos , por ningún lado?
extraño los tiempos blogueros que todas nos encontrabamos en mi casita,.... vos segúis reuniendo gente o también pasó el sunami.... y se fueron para facebook, que también está desolado, que nos pasa ivy? nosé....
te mando un beso y espero que estés de diez!!
p/d que desgraciada la policiá que no pone en la cárcel a estos degenerados, porque no son chiquitos para meterte un balazo... que injusticia....
andrea de reflejos femeninos
Ivanita lo recuerdo perfectamente, que momentos por dios, vos toda una leona defendiendo tu casa y tu familia. Estas leyes de mierda que hace que vivamos encerrados y con miedo los que somos pacíficos, mientras que los agresores siguen a sus anchas. En fin, hay que recordarlo, el pasado es parte de nuestra vida. Besotes tía Elsa.
ResponderEliminarPor un momento te imaginé a vos, armada hasta los dientes (y motorizada), con cara de .."ACÁ NO PASAN".. (música del lejano oeste de fondo) y cargando la escopeta listita para disparar y al perris mostrando todos los dientes!!!
ResponderEliminarNo te digo yo que sos una persona increible!!!! :)
Ya sé en el momento habrá sido de lo más desagradable pero el tiempo cura o al menos suaviza!
Besotes!!