Último viernes del mes de agosto. Ya falta menos para terminar el 8º mes del año, ¡qué lo tiró de las patas!
¿Se acuerdan que los otros días les contaba que había hecho catarsis “archivando” cosas viejas? Bueno, entre esas cosas estaban los diarios que llevaba cuando estuve internada en el Hospital Fernández por el accidente. Al hojearlos encontré un “poema” (o algo así ) que me habían regalado y que hace un tiempo lo publiqué en el blog.
Así que como estoy #ingánica – para no perder la costumbre, je… – decidí repetirlo. Aparte que como dijera la señora Mirtha Legrand, el publico se renueva, ¡ajajaa!
Es un post del 7 de Noviembre del 2007, cuando recién empecé con el blog, así que perdonarán el “estilo” de escritura , era una neófita en esto de bloguear. Aparte por ahí dice que retoñor tenía 11 años, era re chiquiiitooo…
¡Disfrútenlo!
La piel se arruga, el pelo se vuelve blanco.
Los días se convierten en años pero lo importante no cambia.
Tu fuerza, tu convicción no tiene edad.
Tu espíritu es un plumero de cualquier telaraña.
Detrás de cada línea de llegada hay otra de partida.
Detrás de cada logro hay otro desafío.
Mientras estés viva, sentite viva,
no dejes que se oxide el hierro que hay en vos.
"Hacé que en vez de lástima te tengan respeto"
No vivas de fotos amarillas.
Cuando por los años no puedas correr, trotá.
Cuándo no puedas trotar, caminá.
Cuando no puedas caminar, usá un bastón...,
¡Pero nunca te detengas!
Esto me lo regaló en julio del 2000 una "vecina" de cama en el hospital Fernández que se llamaba Verónica (se sigue llamando, creo...)
No se si lo escribió ella, si lo copió, o qué, pero me gustó mucho cuando lo leí, sobre todo la parte que ella había marcado con las comillas que dice: "Hacé que en vez de lástima te tengan respeto".
Aparte de criar a mi hijo de la mejor manera posible con la ayuda de mi familia, una de las cosas que me propuse desde el principio es que no me tuvieran lástima.
Hasta ahora, lo vengo logrando, pero por ahí me encuentro con cada uno, que... bueh!, creen que por que estoy in wheelchair soy una pobrecita mujer que tiene que estar con cara de circunstancia y como pidiendo perdón por estar así...
Muchos pensaron que todo lo que me pasó, iba a ser un motivo de depresión, llanto, tristeza y que iban a tener que tratarme con pinzas.
Pero se equivocaron y feo che...
Vivo la vida sentada!, soy feliz sentada, por ahí tengo ganas de salir corriendo tras mi retoño cuando me saca canas verdes!, pero eso es lógico, tiene 11 años y es una máquina que anda a full!!!
Convengamos que tengo la esperanza que si todo anda bien, en un futuro no muy lejano, pueda dejar mi wheelchair por unos momentitos no más..., aunque después vuelva a usarla, pero esa esperanza me da la fuerza para hacer todo con más ganas!!!
Soy muy optimista, demasiado por ahí! ¡jeje!..., pero como siempre digo: el no ya lo tengo... Probemos a ver si obtengo el si...
Aprendí que de nada sirve estar amargada y llorando por los rincones, nadie va a hacer las cosas por mí, nadie va a vivir la vida por mí...
Me llevó un par de años comprender que no solo tenía que estar bien por fuera, como para que todos vieran la imagen de superada, si no que tenía que sentirlo adentro!!!
Por que mañana... será otro día...
Post original del día 7 de noviembre de 2007.
No hay quién pueda con vos! y eso es lo bueno, las personas así nunca envejecen ni decaen. Seguí así, atropellando a la vida..
ResponderEliminarUn abrazo!
Y luego me preguntás por qué, además de quererte, TE ADMIRO!
ResponderEliminarBien dicho!!!!
ResponderEliminarLo mejor que podías haber pensado y hecho en su momento y continúas pensando y haciendo hoy!
Sólo me resta decir.. VAMOS POR MÁS!!!!!!
ADELANTE!!!
Cariños!