… el mismo día que los tres astronautas amerizaban en aguas del Océano Pacífico poniendo fin a la misión del Apolo 11, yo nacía en la ciudad de San Juan, Argentina.
Y cuenta la historia que en pleno invierno sanjuanino el día que yo nací corrió viento Zonda y parecía un día de verano.
Si, hoy cumplo 42 años , y siempre digo que los años no vienen solos, traen sus cositas .
Vamos a ver, empecemos por lo más importante:
Los años me trajeron 1 hijo maravilloso.
Sigamos.
Los años me trajeron una vida maravillosa a pesar de que hace 13 años tuve un accidente que me dejó en silla de ruedas, y lo más loco es que aún así, estando en silla de ruedas, puedo decir que llevo una vida maravillosa. Por cierto, todos los 31 de diciembre celebro mi 2º cumpleaños que este año harán que cumpla 13 años, que son los años que llevo viviendo mi “nueva vida” in wheelchair, sobre ruedas.
Los años no vinieron solos porque al menos a mí me trajeron canas, varios kilos, pérdida de memoria y esas yerbas, ¡juas!
Los años, y convengamos que el accidente ayudó un poco, trajeron cicatrices… Algunas en mis brazos, en mis piernas, en mi pelvis, en mis caderas, en el alma… Cicatrices que son visibles y otras que no, pero cicatrices que me hacen ver que si se quiere se puede.
Los años me trajeron “sabiduría para reconocer la diferencia”
Los años me trajeron paciencia para sobrellevar lo que me pasó cuando mi vida cambió literalmente “en un vuelco” el 31 de diciembre de 1998, día en que tuve el accidente automovilístico que le costó la vida a mi madre y casi cuesta la mía pero acá estoy, paciencia que me ayuda a tomar lo que me pasó con humor aunque tenga mis días que quiera largar todo al diablo y simplemente quedarme en la cama sin hacer nada.
Los años me trajeron días buenos y días malos, días con lágrimas, días con sonrisas, carcajadas, y más lágrimas… pero esos días con lágrimas siempre al final se transforman en días llenos de sonrisas, porque también los años me enseñaron que de nada sirve llorar en un rincón ya que eso no hace que el tiempo vuelva atrás, o que el accidente no suceda, o que yo no esté en silla de ruedas.
Los años me enseñaron que las pruebas y vicisitudes son parte del progreso eterno, y que son necesarias para templar el carácter y, en mi caso, para saber de qué material estoy hecha. Hasta antes del accidente las cosas eran demasiado “tranquilas”, demasiado rutinarias y aunque suene raro, agradezco haber sufrido el accidente porque me ayudó a cambiar la perspectiva de las cosas. Ojo, eso no quiere decir que todos tengan un accidente o les pase algo terrible para darse cuenta de que se necesita un cambio, simplemente digo que A MÍ me ayudó a ver las cosas desde otro punto de vista. (Y acá iría el chiste de que mi punto de vista es el de estar sentada, ¡ajajaa! )
Y como puse al principio, los años me trajeron a mi hijo Damián, el viento bajo mis alas, la razón por la cual desafié hasta la muerte cuando tuve el accidente con tal de permanecer en esta tierra para verlo crecer y convertirse en un hombre de bien… Y hasta ahora vengo disfrutando a pleno el ser la mami del Retoñor.
42 años, 24 de julio, 42 – 24, los números cambiados… Esas cosas mías con los números, lo sé…
Por cierto, todos hacen una fiesta en su cumpleaños con invitados y todo, pero yo confieso que no soy de hacer fiesta (solo festejo en familia ) porque – aunque suene raro - todos los días “festejo” y agradezco estar viva. Ah! y otra cosa que hago es seguir adelante a pesar de todo, cosa que no es fácil pero les aseguro que vale la pena intentarlo.
Por todo eso que conté y por todo lo que me traerán los años que vendrán, simplemente voy a decir:
¡Feliz 42 cumpleaños para mí!
FELIZ CUMPLEAÑOS IVANA!!!!!!!!!!
ResponderEliminarQue los días venideros sean bálsamo para las heridas y, con ese hermoso hijo, transites el futuro con logros siempre positivos.
Que el amor los cubra y que lo bueno venga siempre a vuestro encuentro.
Cariños
Que lindo regalo te trajo la vida..
ResponderEliminarUN RETOÑO HERMOSO.
Feliz cumple Ivy querida.
Un abrazo ASI de grande
Feliz cumple Ivy, si amiga los años traen muchas cosas, entre otras sabiduría, y saber que el libro de la vida esta casi casi todo escrito, pero que siempre la vida te puede sorprender. Dios seguro te dió una misión, cuidar de tu hijo, de tu linda familia y ser un ejemplo a seguir por muchos que a veces nos quejamos por nimiedades. Besos y que pases un muy feliz día rodeada de los seres que te aman.Tía Elsa.
ResponderEliminarMi querida y adorada @Abuela Ciber...
ResponderEliminarGracias por tus palabras Abue...
Te mando miles de besos... ;)
Gracias @Marisiitaaa!!!
ResponderEliminarTe quiero amiga! Un besote! =)
@Tia Elsa: Realmente la vida te puede sorprender, eso tiene de bueno, no nos aburrimos jamás.... ;)
ResponderEliminarGracias por pasar y dejar tu ternura!
Un besote y acordate que te quiero mucho! ;)
Feliz cumple, Ivy!!!!
ResponderEliminarUn beso grandote y un cálido abrazo (viene bien en estos días de fresquete).
Los años traen cosas y se llevan cosas, pero casi todas son físicas. Lo que hay que cuidar es la juventud interior, las ganas de hacer, de cambiar, de aprender, de compartir.
Y por acà sí le dejo 42 tironcitos de orejas jajás!
ResponderEliminarUn beso y que hayas pasado un día fantástico.
Menciono tu cumple en la covacha... no te lo digo para que vayas a comentar, entre ingánicas nos entendemos jajás!
Chaucito y buena semana
Muchas felicidades, mi amiguita patagónica!!!! y que cumplas muchos mas!!!! La torta virtual, riquísima!!!!
ResponderEliminarbesos y sabes que te quiero mucho