¡Muy Feliz Año Nuevo, Mi Gente!

¡¡Feliz Año Nuevo!!

Y si, llegamos al 2018.

Esos de la foto somos mi Retoñor Damián, el viento bajo mis alas, y la que suscribe, la Ivy.

Para los que nos conocemos desde que empecé el blog allá por el 2007 (y nos seguimos por Twitter y Facebook) ya nos conocemos las caripelas, pero como el público se renueva (?), acá estamos, estos somos. A esta altura de mi “vida” en la WEB ya es hora de que sepan cómo luce (?) la responsable de las publicaciones de este blog, que desde hace unos años anda muy ingánica y vieja, así que actualiza el blog cada vez que tiene ganas y que se acuerda, claro...  

No voy a caer en lo de siempre y empezar a hacer balances y poner resoluciones porque primero no soy contadora (¡cuack!), y segundo, porque en eso de las resoluciones y los propósitos soy un desastre, porque por más que los anote y los piense no los hago... Y si, no puedo confiar ni en mí misma, ¡ajajaja! Es por eso que yo sigo el ¿credo? ¿Mantra? Whatever!, de los Alcohólicos Anónimos: un día a la vez. Tan mal no me ha ido, ¿nocierto?

Así que con eso de “un día a la vez” en mente vamos a encarar este 2018, año par, con actitud. Ya saben que no soy muy fan de los años pares pero es hora de que deje mi superstición (?) de lado y deje que todo fluya.

Bueno, Gente, les deseo lo mejor para este año, que logren sus metas, que dejen de lado viejos hábitos y adquieran nuevos;  y sobre todo les deseo que sean felices, porque ser feliz es una decisión, una actitud, ya que como decía mi viejo amigo (?) William Shakespeare:

“Aún en el tiempo más borrascoso, las horas y el tiempo pasan...”

¡¡Feliz Año Nuevo!!